Cuando estamos al aire libre, todos sabemos que debemos protegernos la piel del sol y sus rayos nocivos. Hay que saber que no todo lo relacionado con el sol es malo: la luz solar ayuda a nuestro organismo a producir vitamina D.
Pero estos consejos te ayudaran a cuidar tu piel cuando tengas exposición al sol:
· Ponte un protector solar con un factor de protección solar (FPS) de por lo menos 15 antes de la exposición al sol, incluso cuando esté nublado o no hayas planeado pasar mucho tiempo al aire libre. Si te mojas, por ejemplo cuando vas a nadar al mar o a una piscina descubierta, repite la aplicación de la crema protectora cada 2 o 3 horas.
· Elige una crema de protección solar que retenga tanto los rayos UVA como los UVB. Busca expresiones como "protección de amplio espectro" o protección UVA, aparte de un FPS o IP de 15 o superior. Elige una crema solar que sea "no acnegénica" o "no comedogénica" para ayudar a mantener limpios los poros de la piel.
· Los rayos solares son más fuertes entre las 10 de la mañana y las 4 de la tarde, de modo que, durante esas horas, repite la aplicación de la crema solar frecuentemente y, a ser posible, resguárdate del sol.
· Utiliza más protección solar (un FPS más alto) cuando estés cerca de superficies reflectantes, como el agua, la nieve o el hielo.
Por: Enrique Alonso Enriquez Gonzalez
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